Reflexión sobre el concepto de "ética" a los ojos de Fernando Savater.

Reflexión sobre el concepto de "ética" a los ojos de Fernando Savater

Por: Exler Felipe Puerta Velasco

Para empezar cabe aclarar que Fernando Savater empieza hablando sobre la ética mientras la categoriza entre los conceptos que se definen a través del tiempo, es decir que su definición va evolucionando y transformándose, y nunca se puede definir del todo. De igual manera Savater arranca su discurso, poniendo su consideración sobre la democracia a la que se va a referir, y sobre la ética, una "laica y universal" como eje de cualquier democracia.

El concepto de ética para este filósofo español es una reflexión; "es una actividad que se lleva a cabo para tener consideración de algo, meditando y pensando al respecto" (definición según la RAE de "reflexión"). Y las características de esta reflexión van ligadas a que es de un sujeto sobre lo que va a hacer con su libertad; es una reflexión individual sobre esta libertad propia que cada uno tiene, en relación con la libertad que los demás poseen y con la libertad a nivel social en la que se mueve este individuo que reflexiona. Es la reflexión sobre lo que significa “ser-libre” en un entorno social.

En el momento en que se hace un reconocimiento del otro como “ser-humano”, se empieza una relación entre sujetos; hay una reciprocidad en el trato social. Y esta relación reciproca es entre sujetos, y no entre objetos. Hay que tener un entendimiento de que el otro también está reflexionando, también tiene su identidad y su libertad.

En este punto, Savater aclara algo bastante pertinente de resaltar y tiene que ver con el individualismo. Así como se cree que la ética es una panacea universal, de la misma manera se tiene un mal concepto sobre el individualismo. Para el autor de La Ética que Fundamenta la Democracia, el individualismo no es desentendimiento, es la forma de vivir con la sociedad, en la sociedad y dentro de la sociedad. El individualismo es ser y sentirse individuo, pero no tiene que ver con un egoísmo y distanciamiento hacia la sociedad y hacia el otro. El individualismo, más que nada, busca es fomentar la autonomía. Y es por esto que la ética es base de la democracia.

Por último, la reflexión sobre el concepto de ética se mueve bajo dos dimensiones, una corporal (propia, individual, personal y física) y otra a nivel social, que radica en ese reconocimiento de que se vive en sociedad y de que el otro también tiene su dimensión corporal. Por esta razón, Fernando Savater menciona tres núcleos de donde pueden partir más principios sobre la ética. Estos son: la inviolabilidad de la persona, que tiene que ver con el herir o dañar a alguien por búsqueda de un beneficio o satisfacción personal; el segundo es esto de la autonomía que cada persona posee, y que va ligada a un desarrollo de tolerancia con respecto a la autonomía de los demás; y un último núcleo que tiene que ver con la dignidad humana, que ayuda a enraizar la identidad cultural en la sociedad.